El suicidio mediático de la editorial OrangON

  

Con una corta trayectoria de apenas 5 meses, OrangON ha personificado el dicho "Manolete si no sabes torear, ¿Pa que te metes?". Independientemente de sus decisiones editoriales, su política de comunicación por Internet, ha demostrado ser más dañina que beneficiosa para la empresa.

 

Comenzaron metiendo el remo con un comunicado victimista en su blog, donde se quejaba del trato de la organización del Japan Weekend, y renunciaba a ir. Cuando entre los varios comentarios en el post, escribieron los organizadores enmendándoles la plana, no tuvieron mejor idea que borrar todos los comentarios y cerrar el post. Primero ir de victimas, y luego borrar las replicas en plan "es mi pelota, ahora me enfado y me la llevo".

 

Después anunciaron que aplicarían la subida del IVA tanto a su publicación en papel, como a la digital. Sin embargo, al echar las cuentas, resulta que la subida era más alta que la estrictamente legal. Ante las quejas, un borrado mas de comentarios.

 

La cosa se convirtió en traca valenciana, cuando anunciaron la cancelación de la serie "Wish Upon A Star", acusando a su autora de "engaños y difamaciones". Pidiéndola además que realizara un capítulo final (¿?). La autora contraataco, contando que la editorial no la había pagado todo lo acordado por el primer capítulo, y que incluso había acordado con la editorial un retraso en la fecha de entrega. Otra vez un montón de comentarios en su blog; otro borrado de comentarios y cierre del post.

A estas alturas, las redes sociales hervían en comentarios contra la editorial. Su cutre censura, provoco que la gente se posicionara casi toda a favor de la autora. No ayudo el que para apoyar sus posturas, usaran recortes de correo de otros autores, y se los enviaran a otros autores distintos. Hablaron entre ellos, y la cosa fue cogiendo color negro hormiga.

 

Finalmente, los autores se pusieron en plan "Fuenteovejuna", y decidieron rescindir en bloque sus contratos con la editorial, anunciándolo a mansalva por la red. O sea, una revista de "mangas" sin capacidad de continuar sus obras. El Titanic tenía mejor pinta después de chocar contra el iceberg.

 

Como penúltimo capítulo, la editorial público un comunicado pidiendo disculpas, echando la culpa a un "lenguaje muy coloquial". Además de anunciar que están pasando un "bache económico" (vamos, que no tienen un euro). Eso sí, en esta ocasión no aceptan comentarios.

 

En resumen, no solo han ejercido una censura absurda y totalmente fallida; algo que en estos tiempos en que tan en boga esta internet, es uno de los pecados peores vistos por los internautas. Además han atacado a "autores patrios", una grave ofensa en el mundillo otaku. Para rematar la faena, publicitan que apenas tienen recursos económicos; para otorgarles mucha confianza, vamos. Todo esto solo usando internet.

 

Resulta impresionante como han socavado, casi hasta los cimentos, su reputación en tan poco tiempo. Esto es una clara muestra de lo que puede hacerse por Internet. La red es un arma de publicidad de doble filo: puede hacerte archí conocido, o puede hundirte en el fango. Si no se sabe usarla, es mejor que la empresa no se meta en ella: un uso negligente, puede hacerla un daño enorme. Esto es el porqué la figura del community manager, está cogiendo tanta relevancia hoy en día. Se necesita gente especializada en esto, capaz de dar la información de la empresa con claridad, y responder a las críticas con sensatez y coherencia. Sin alguien así, participar en la red es un suicidio, como claramente ha demostrado la editorial OrangON.