Esta semana nos hemos juntado con 2 noticias con
resultados judiciales dispares: En Madrid, una compañía de titiriteros
representaba una obra con contenidos no aptos para menores, coronada con una pancarta
de supuesta alabanza al terrorismo. En Barcelona, un profesor pederasta era
denunciado, reconociendo este sus delitos durante años, inclusive en una
entrevista. A los titiriteros a
la cárcel sin fianza,
al pederasta lo han
dejado en libertad con cargos.
Resulta
sorprendente que en 2 sucesos calificables de “lesivos para los niños”, sea el
primero el que permita echar al calabozo
y tirar la llave. Supongo que se debe al “enaltecimiento del terrorismo”,
algo que deberá probarse. Circula por internet una versión que afirma que la pancarta la pone en la
obra, un muñeco que hace de policía corrupto, para crear falsas pruebas. Pero
no he visto la obra (ni encontrado video en el que se vea bien), por lo que no
puedo afirmar nada a ciencia cierta.
Lo
que sí puedo decir, es que me entristece que por una representación teatral
(todo lo equivocada que pueda estar), puedan meterte en la cárcel sin fianza.
Veremos si están hasta el juicio, aunque espero que no. Entonces estaríamos más
cerca de países como Turquía que detiene académicos, Arabia Saudí que
castiga con latigazos a blogueros, o Egipto procesando a
periodistas por terrorismo. Todos los pases tienen leyes que regulan la
libertad de expresión. Dependiendo de cómo las usen, así habrá más o menos
libertad en ellos. Eso sí, luego todos
somos Charlie Hebdo; al menos hasta que nos toca algo que nos importe a
nosotros.
1 comentario:
Cosas de tan absurdas, que hasta es normal que pasen por este país lleno de absurdeces. Verdaderamente lamentable v_v
Publicar un comentario