Malditos mercados

En estos días, la prima de riesgo de la deuda española se está disparando hasta límites nunca vistos. Antes de las últimas elecciones generales, se dijo que era por culpa de que los mercados no se fiaban del gobierno de entonces. Con el cambio, apenas hubo un breve respiro antes de volver a subir. Después se dijo que con las reformas (actual eufemismo de recortes y austeridad), volvería a confiarse en España. Tras varias baterías de reformas, la dichosa prima roza los 500 puntos. Visto el panorama, solo se me ocurren 2 escenarios posibles:

• 1. Los encargados económicos del gobierno son unos inútiles redomados. No tienen ni pajolera idea de lo que demandan los mercados, y sus reformas solo consiguen que los mercados desconfíen mas, de la capacidad económica de España.
  
   
• 2. A los mercados les importa un comino lo que haga el gobierno español. Solo buscan sacar el mayor beneficio económico posible, sin importarles los muertos que queden por el camino. Y su sueño húmedo es que quiebre España, para pegar un pelotazo de los gordos.
  
   

En cualquiera de los dos casos, las perspectivas son bastante negras. En verdad, esos seres misteriosos y malignos, a los que denominamos genéricamente "mercados", se han convertido en los verdaderos monstruos del siglo XXI. Y no conocemos estacas o balas capaces de acabar con sus maldades.