Incluyo una nueva sección en el blog: recetas culinarias sin grandes complicaciones; ideales para quien no quiere comer siempre comida precocinada, pero tampoco liarse en exceso en la cocina.
La pasta es uno de los platos mas fáciles de realizar, pero siempre hay que echarle algo para darle sabor. A mi gusta mucho el queso, pero lo prefiero fundido, no gratinado. Por eso el tipo de queso importa bastante. A mi el que mejor resultado me da, para quedar fundido, es el tipo mozzarella.
MACARRONES
CON QUESO FUNDIDO
Ingredientes
para 1 persona:
- Un
puñado de macarrones. Yo mido la cantidad echándolos primero en un plato, para
hacerme mejor a la idea.
- 1
brick de tomate frito de unos 230 g.
- 1
sobre de queso rallado mozzarella.
- Sal.
Preparación:
Echas los macarrones en una cazuela, los cubres con
agua, echas un poquito de sal, los tapas y los pones a cocer a fuego medio.
Alrededor de 10 minutos después,
abres un poco la tapa y bajas el fuego al mínimo, para que sigan cociendo.
Entonces precalientas el horno a 180º, mientras coges una
bandeja de horno, poniendo un papel de horno encima. Sobre el papel echas una
capa de queso.
Cuando falten un par de minutos para que termine el
horno, coges la cazuela y la vacías de agua (usar un escurridor es lo mas
practico). Vuelves a echar los macarrones en ella, añadiendo el tomate.
Remueves para que se mezcle bien, pones el fuego al máximo hasta darle un
hervor, y lo apagas. Despues pones los macarrones en la bandeja, echando otra
capa de queso sobre ellos. Cuando termina el horno metes la bandeja, y lo pones
unos 6 minutos en la opción de
gratinar. En cuanto termine estará listo.
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